El joven navarro desoreja su lote, acompañado a hombros por Andy Cartagena con tres apéndices. Moura Caetano tocó pelo en su primero.

Magnifico ambiente presentaron los tendidos del “coso de la cuerda” en el tercero y último de los festejos celebrados en estos días de feria, superando hoy con creces a la muy discreta entrada que se pudo apreciar en la corrida de toros de a pie del día 25, ¡con lo que siempre ha supuesto para Almagro su día 25, su día grande…! “Para tomar nota”

El público de los rejones se divirtió en una tarde-noche entretenida, variada, agradable en lo climatológico y como no, con las neveras cargadas a tope, con los tradicionales ágapes para una cena de domingo entre cabriolas, orejas y espectáculo de rejones en el ruedo, digamos que “todo el mundo feliz” que ya es importante cuando el público acude a una plaza de toros.

Al finalizar el paseíllo se guardó un minuto de silencio por el reciente fallecimiento de Dña. Juana Hermoso de Mendoza, tía de Guillermo y hermana de Pablo Hermoso. Un paseíllo donde los alguaciles entorpecieron la belleza del mismo, llegando uno de ellos a meterse (con total parsimonia y falta de respeto) por medio del clásico carrusel con el que comienza toda corrida de rejones… “las cosas de las cosas”

La corrida de Hnos. Moura Caetano comenzó con un primero colaborador al que Andy Cartagena cuajó con “Cartago” y sus frondosas crines al viento. El perla hispano-luso tiene personalidad y además genera belleza por su expresión y su espectacular melena. El alicantino disfrutó con el ritmo del toro a dos pistas, aprovechando ese compás que requiere el toreo a caballo para templar, dejárselos llegar y llevar cosidos en los estribos. La afición almagreña desde el minuto uno estuvo con Cartagena, que sabe tocar las cuerdas de ese toreo a caballo accesorio que personaliza su concepto. Los aires circenses, los caballos en los estribos de la barrera y el provocar al tendido es tarea sencilla para un Andy que siempre conecta con estos públicos.

En su segundo quizá excedió el castigo del segundo rejón, yendo muy a menos y apagándose por falta de raza. Lo tuvo que hacer todo el de Alicante para arrancarle el trofeo.

Moura Caetano es un veterano rejoneador portugués, que posee el concepto clásico y puro del arte de Mari-Alva. Ir de frente, batir al pitón contrario, ofrecer los pechos de sus caballos y clavar con rectitud al estribo es la predicación de su estilo. El primero lo brindó a la familia Hermoso de Mendoza. Anduvo certero en los embroques, terrenos y lidia de sus dos oponentes, brillando algo más con su primero, de mucha más movilidad y colaboración. Se las tuvo con el palco presidencial, el cual a mi parecer acertó en la no concesión de la segunda oreja de su primero. Por el contrario, debió valorar la petición en el quinto otorgando la oreja por petición mayoritaria, de ahí la sonora y unánime bronca posterior del respetable.

Guillermo Hermoso de Mendoza se hizo presente en el ruedo almagreño montando a Alquimista, con ese paso cadencioso y perfecto del sello De Mendoza, que ya de salida marca las diferencias. El mosquero de oreja a oreja, la cara de Alquimista en el sitio, sin ningún tipo de aspaviento y con una naturalidad que después se ve desarrollada en la lidia de sus toros.

Ante el primero tuvo que fajarse y dejarse llegar a las grupas los “disparos” que tuvo a la defensiva el berrendo que hacia tercero. A pesar de esa falta de ritmo de su oponente y las dificultades con el mecanismo que sujeta en la cintura las riendas en los pares a dos manos en los finales de su actuación, consiguió el navarro resolver con frescura la papeleta obteniendo dos orejas.

En el que cerró plaza vino lo más rotundo de la tarde. Con el redondo “Jibaro” iba a cuidar Guillermo a su oponente con un solo rejón, para después formarle un auténtico lio. El imponente físico que lució “Extraño” causó impresión por su potencia, flexibilidad y manera de llevar al toro cosido y encelado. Los quiebros llenos de pureza montando a “Ecuador” elevaron aún más el tono de su actuación. Dicho sea de paso, que el tendido rugió con esta actuación de una manera rotunda, y no hicieron falta adornos ni aires superfluos de provocación paralela a lo que verdaderamente es torear a caballo.

El epilogo con las rosas montando al castaño “Esencial” trajeron el recuerdo de D. Ángel Peralta sobre el mítico “Mejanes” que junto al par a dos manos hicieron presagiar los máximos trofeos, quedando en el doble apéndice por la colocación poco efectiva del primer rejón. Al segundo intento acabó Guillermo con el de Moura Caetano que se fue sin las dos orejas hacia el desolladero, para poner el broche a la feria de Almagro y el mejor homenaje de la familia Hermoso de Mendoza a su “tata Juana” que en paz descanse.

Plaza de Toros de Almagro. Tres cuartos del aforo permitido. Tarde-noche muy agradable.

Se lidiaron toros de Hnos. Moura Caetano (Procedencia Murube-Urquijo) desiguales de presencia y comportamiento.

Andy Cartagena: Dos orejas y oreja.

Moura Caetano: Oreja y vuelta tras fuerte petición.

Guillermo Hermoso de Mendoza: Dos orejas y dos orejas.

Andy Cartagena y Guillermo Hermoso de Mendoza salieron a hombros por la puerta grande.

Crónica: Víctor Dorado Prado.

Fotografías: Jesús Monroy.