Puerta Grande para el peruano Roca Rey que corta dos orejas a su primer toro y Francisco de Manuel que corta tres. Tarde aciaga de Alejandro Talavante que se deja un toro vivo y escuchó los tres avisos en el último festejo de la temporada en Las Ventas.

Con el cartel de no hay billetes en las taquillas, se ha celebrado la tradicional corrida de la Hispanidad con un cartel de auténtico lujo para los aficionados y también para los que, en gran número, acudieron al coso capitalino por ser el día que era y que no sé si volveremos a ver por aquí. Que eso influyó en el devenir de la tarde es un hecho, como el exceso de triunfalismo que se respiraba en el ambiente al deshacerse el paseillo tras escuchar los acordes del Himno Nacional con el público puesto en pie de forma respetuosa.

Se lidia una corrida o un saldo de reses ¿porqué no decirlo? de la ganadería de Victoriano del Río ubicada en el madrileño término municipal de Guadalix de la Sierra de presentación un tanto irregular y justa, tapándoles esa justeza de remate la cara y no en todos los casos, flojos en líneas generales, nobles, con cierta clase el segundo tris, tercero y quinto, siendo este el que debería haber sido lidiado en sexto lugar pero que se adelantó su salida para dar tiempo a que se incorporara al festejo Andrés Roca Rey al tener que pasar el diestro peruano a la enfermería por lo que aparentaba ser un corte en su mano izquierda.

Hasta ocho toros han saltado a la arena al ser devuelto el segundo toro por inutilidad manifiesta y correr la misma suerte el primer sobrero por similares circunstancias, saliendo el segundo sobrero, toro feo se mirase por donde se mirase, grandón como él solo y con una conformación córnea más propia de un búfalo que de un toro de lidia. Pues con todo y con eso quizás fue el mejorcito del encierro. Qué cosas.

La terna de matadores la compusieron Alejandro Talavante que cumplía su quinto paseillo en Las Ventas esta temporada, el peruano Andrés Roca Rey número uno del escalafón sin lugar a dudas y el madrileño Francisco de Manuel que recibía esta comparecencia, en un cartel de auténtico lujo, como premio por ser el triunfador de la Copa Chenel de esta temporada en la final que se celebró tiempo atrás en Valdetorres del Jarama.

Ahora viene un problema para quien escribe esta crónica, ¿qué digo de Talavante después de haber pasado cinco veces por aquí este año?, podria hacer un «corta y pega» de crónicas anteriores y podría añadir también que una vez más se cumple la famosa Ley de Murphy con el pacense este año en Las Ventas.

A Alejandro Talavante se le atraganta Madrid, yo no sé si es cuestión de mala suerte, si es que no puede o no está, o es cuestión de mentalidad. Lo intenta, lo intenta pero no le da, prueba y prueba pero no llega, apunta y apunta pero no termina de rematar.

Demasiada frialdad, demasiada apatía e incluso desentendiéndose a veces de lo que pasa en la plaza y eso en un director de lidia se ve demasiado. Así lo veo yo y mira que ansiábamos su vuelta después de su retiro, pero la paciencia tiene un límite. Lo que ha hecho con la espada o mejor dicho con el descabello en el cuarto es para clamar al cielo. Ha provocado, permaneciendo impasible, después del enésimo intento que sonará el tercer recado presidencial para que el toro se fuera a los corrales. No quiero hacer demasiada leña del árbol caído pero Talavante debe tomarse un tiempo, meditar mucho y aclarar ideas o espantar fantasmas. En fin…

Roca Rey es otra historia, es el figura del momento, controla el escenario como nadie, tiene una puesta en escena espectacular, se pone como pocos, templa como el que más, conoce las distancias a la perfección y las aplica, se entrega en cuerpo y alma sea cual sea la condición de los toros que le toquen en suerte, puede gustar más a unos o menos a otros pero su labor siempre tiene una estructura y sabe alternar el toreo fundamental con el accesorio, no deja indiferente a nadie, se sabe un figura y trata por todos los medios de demostrarlo, es torero sin más. Se pasa muy cerca los toros y siempre lo hace con ambas manos, no se puede pedir más. Dicho esto sólo me queda decir que no soy yo el mayor de sus partidarios pero la verdad no tiene más que un camino, ¿que su labor no era de dos orejas en su primero?, yo creo que no y menos en la primera plaza del mundo, ¿regalo? pues igual si porque la Puerta Grande debe ser un poco más cara. Yo creo que una oreja habría sido de mucha fuerza y unánime pero dos… Todo lo dicho anteriormente se le puede aplicar hablando de su primer toro, su segundo no le dio opción alguna pero no volvió la cara. Roca Rey arrasa y llena, eso es ser figura del toreo.

El madrileño Francisco de Manuel estuvo muy bien toda la tarde, muy por encima de sus enemigos, mucho mejor en su segundo toro que en su primero en el que se le notaron más carencias, nervios y aún así estuvo muy digno y sacando series de calidad y belleza, pero fue en su segundo cuando subió enteros manejando la pañosa con la zurda con cadencia, lentitud y muy por abajo llevando las embestidas hasta el final.

Con la derecha se lució conduciendo las lentas embestidas del animal y tragando a veces con la incertidumbre de si el toro acabaría pasando del todo o no. Una oreja en su primero y dos en su segundo ¿fueron demasiado premio?, yo pienso que si, que fueron excesivos premios para unas labores que dentro de unos días pocos vamos a recordar.

Vuelta en su primero y una oreja de ley en su segundo habrían sido más valoradas por los aficionados. De todas formas esa Puerta Grande le servirá para volver y que se le mire con lupa aunque se le saque a saludar al finalizar el paseillo por lo que ha conseguido hoy.

Francisco de Manuel debe volver para refrendar y demostrar que puede repetir lo de esta tarde pero sin regalos presidenciales. De ahí lo del titular, saldo de ganado y regalos de casquería según mi criterio, para otros habrá sido justo, ya se sabe que para gustos están hechos los colores.

Y esto ha sido todo por este año, Las Ventas ha echado el cierre de la temporada y los aficionados nos hemos despedido de nuestros vecinos de abono con un hasta la próxima, ya nos veremos, cuidaros y procurad no pasar mucho frío este invierno que las cosas de las calefacciones no pintan bien por el tema de la guerra, pues eso mismo les deseo a todos los aficionados y lectores de Cargando la Suerte.

Por cierto, se me olvidaba, se desmonteraron Juan Carlos Rey y Fernando Sánchez pareando al quinto que debió ser el sexto.

Hasta siempre.

Crónica: Tomás Mata Menchero
Fotos: © Alfredo Arévalo (Plaza 1)

FICHA DEL FESTEJO

Plaza de toros de Las Ventas (Madrid). Festejo del Día de la Hispanidad. Lleno de «No hay billetes».

Toros de Victoriano del Río para Alejandro Talavante, Roca Rey y Francisco de Manuel, desiguales de presencia y juego.

Alejandro Talavante, silencio y bronca tras tres avisos y ovación al toro

Roca Rey, dos orejas tras aviso y vuelta al ruedo al toro (2º tris) y silencio

Francisco de Manuel, oreja y palmas al toro y dos orejas y ovación al toro (corre turno a la espera de la salida de Roca Rey de la enfermería)

Incidencias: Tras la lidia del segundo toro Roca Rey pasa a la enfermería para ser atendido de un corte en la mano. 

Tras finalizar el paseíllo, sonaron los acordes del himno nacional. En banderillas, se desmonteró Viruta en el segundo. En el quinto, hicieron lo propio Juan Carlos Rey y Fernando Sánchez.

PARTE MÉDICO ROCA REY. Herida incisa por estoque en región palmar zona II de mano izquierda con afectación nervios colaterales 3er dedo. Es intervenido bajo anestesia local. Contusión con hematoma en dorso de pie derecho. Pronóstico reservado que no le impide continuar la lidia.