Hoy si salieron al ruedo dos importantes toros con distintas condiciones de Santiago Domecq. Borja Jiménez cortó una oreja y Talavante perdió con la espada el triunfo.
Que bien vestidos iban hoy los tres matadores, impecables con vestidos de los caros, caros de verdad.
No esperábamos de la ganadería titular de hoy y triunfadora el pasado año, una presentación tan escasa pero aun así confiábamos en que los resultados fueran al menos como los del año pasado y la verdad es que los toros de Santiago Domecq han ofrecido ciertas posibilidades que por unas cosas u otras no se han podido rematar ya que algunos se han toreado en el tercio de muleta en unos terrenos que a juicio de los aficionados no eran los más idóneos, pero el “caladero” está, como muchas otras tardes en los terrenos del tendido 5, allí se encuentra el aplauso fácil, los toreros lo saben y para allá van y si encima se ponen demasiado cerrados pues luego pasa lo que pasa.
El que ya la corrida completa no fuera de Santiago Domecq y fuera remendada con un toro de Luis Algarra lidiado en cuarto lugar, ya hacía sospechar que en los corrales había habido lío.
La actual ganadería de Santiago Domecq, si nos remontamos al anterior escalón se forma con reses de Torrestrella, Juan Pedro Solís, Jandilla y Hermanos Núñez, es decir, de varios titulares pero de la misma sangre. La corrida ha sido de presentación escasa, sin remate, justita de poder pero con mucha clase e incluso alguno con mucho que torear y que no ha sido exprimido como a la mayoría nos hubiera gustado. La tarde era perfecta de temperatura aunque con alguna brisa ventera que molestó en ciertos momentos a los toreros y que a fe de decir lo que nos pareció, quizás fuera en los terrenos elegidos donde llegaba a molestar más los soplidos de Eolo.
Uceda Leal, Alejandro Talavante y Borja Jiménez conformaban la terna de matadores. A Borja Jiménez se le obligó a saludar desde el tercio, roto el paseíllo, una ovación iniciada desde el tendido 7 en recuerdo de su último paso por estos lares donde consiguió salir por la Puerta Grande.
Suenan clarines y timbales para que salga por la puerta de chiqueros el primero de la tarde que corresponde al torero del barrio de Usera, Uceda Leal. Es este un toro de hechuras no demasiado finas, amplio de sienes pero que muestra humillación y prontitud a pesar de que acaba de pasar del todo en el capote de Uceda y que hace pelea empujando en el caballo en las ocasiones. Entra Alejandro en su turno de quites para dejar unas chicuelinas aceptables sin más. En banderillas el toro muestra alegría aunque por el pitón derecho no lo hace entregado del todo.
Muleta en mano inicia Uceda Leal una faena que el toro no acepta del todo pues se queda casi siempre debajo a pesar de hacerlo con presteza cada vez que se le solicita embestir pero sin salirse de los vuelos y casi siempre en línea recta. Con la mano zurda deja Uceda algunos muletazos sueltos de buena factura y elegancia pero a pesar de la clase del toro ya no humilla tanto después de los embroques. Deja el diestro una estocada de ejecución perfecta un punto rinconera que da con el toro en tierra. Ovación con saludos.
El cuarto toro es el remiendo de la corrida y pertenece a la ganadería de Luis Algarra. Es un toro cuajado y serio pero sin encelarse en los capotazos de recibo que no hace buena pelea en el tercio de varas e incluso se repucha en el segundo puyazo y que mejora en el tercio de banderillas.
Con gusto y torería comienza Uceda su inicio de faena con la figura desmayada y ayudando las embestidas del animal que empieza a manifestar que los embroques no son ni parecidos a los finales de los muletazos. Retazos de torero clásico en pasajes interesantes pero que el de Algarra no está dispuesto a ofrecer al torero por mucho tiempo más por su falta de fondo y que hace que el matador cambie de espada para después de pinchar en primera instancia dejar una estocada de colocación similar a la de su primer toro. Palmas del respetable.
Alejandro Talavante volvía a Las Ventas dos días después para hacerse cargo de su lote de esta tarde. Es su primer toro un animal cortito de manos y lomo recto al que recibe el pacense con lances a pies juntos que el burel admite con humillación pero sin desplazarse del todo. Blandea después de su primer encuentro con el caballo aunque muestra humillación en su segunda vara empujando abajo. En banderillas es pronto a las llamadas pero con las fuerzas muy justas en su galope lo que acusa en la muleta que le ofrece Talavante en los inicios de su labor muletera perdiendo las manos con demasiada frecuencia. De cuidador y enfermero tiene que hacer el torero templando con suavidad las embestidas pero las opciones son nulas. Estocada rinconera, como casi todas las que se han ejecutado esta tarde, acaba con el toro. Silencio.
Largo, muy largo, de sienes estrechas y con mucha caja es el quinto toro de la tarde con el que volvemos de nuevo a lo de Santiago Domecq.
Con verónicas de recibo para Alejandro Talavante a este toro que aparentemente es noble y humillador. Derriba en su primera acometida al caballo golpeándolo con fuerza y pelea con la cara abajo en el segundo encuentro para ponerse un tanto reservón en el tercio de palitroques no sin antes recibir una serie de chicuelinas ajustadísimas ejecutadas por parte de Borja Jiménez en su turno de quites.
Con estatuarios comienza el matador la faena de muleta. El toro tiene clase y el de Badajoz lo pasa con ambas manos de forma no tan despaciosa como se podía esperar lo que hace que haya división de opiniones en los tendidos. Series templadas y remates muy toreros componen una estructura de faena que no llega a la ligazón deseada e improvisa adornos para finalizar con muletazos templadísimos genuflexo. Entra a matar ejecutando la suerte de mejor forma que la colocación del acero, tarda el toro en caer, aviso desde el palco que hoy ocupaba Don Eutimio Carracedo y tras utilizar el descabello acaba con el quinto toro que recibió una ovación en el arrastre. Palmas para el matador.
Se hace presente Borja Jiménez para hacerse cargo del toro que en tercer lugar aparece por la puerta de chiqueros, un toro suelto de carnes, con el remate más que protestable para esta plaza, veleto y serio por delante que echa las manos al aire cuando le ofrece el diestro sevillano de Espartinas el capote. En el tercio de varas se emplea empujando con fijeza cosa que no hace de igual forma en su segundo encuentro con el picador. Pasa el segundo tercio sin nada especialmente reseñable y montera en mano se dirige Borja Jiménez a brindar al público su quehacer con la franela.
Rodilla en tierra comienza el torero con muletazos que enfervorecen al público. El toro exige y pide más los terrenos de las afueras que donde la inicia Borja, pero no sabemos bien porqué ha elegido un sitio donde el toro pesa más, aun así el torero parece echar la moneda al aire y colocado, conduciendo las embestidas de principio a fin y no sé si un puntito acelerado por la bravura e intensidad de las embestidas del toro el caso es que los tendidos rugen, rugen pero en más medida los más próximos a los de los terrenos elegidos por Borja que el resto y más cuando sobre la mano izquierda la faena baja en intensidad precisamente por la falta de ajuste entre el toro y el torero. Vuelven a subir los decibelios de los olés cuando vuelve sobre la mano diestra y el torero se embragueta para pasar al toro una y otra vez haciendo variar la línea recta de las embestidas y trazar las curvas. Toro bravo al que quizás en los terrenos más allá de la segunda raya hubiera lucido bastante más. Con la espada de verdad se perfila el sevillano a mucha distancia lo que nos hizo pensar a algunos que iba a ejecutar la suerte suprema recibiendo, no fue así y a pesar de irse con fuerza hacia el toro pincha en primera instancia cobrando una gran estocada al intento siguiente ejecutado desde más cerca. Petición, oreja y vuelta con el beneplácito unánime de los asistentes. Ah, tomen nota del nombre de este toro «Experto» que ha sido muy pero que muy bravo y vuelvo a repetir, ese toro en los medios seguramente habría sido espectacular y no había tantas excusas como para torearlo donde se hizo, que viento no hacía tanto o casi nada.
Para cerrar la corrida de hoy salió al ruedo un toro de forma y tipo muy parecido al primero de la tarde, amplio de sienes, basto de hechuras y serio que no facilita la labor capotera de Borja Jiménez pero que al caballo acude con presteza realizando el picador Alberto Sandoval uno de los tercios mejor ejecutados de lo que va de feria y que el toro acepta a medias solamente. Hace hilo con los banderilleros en el segundo tercio apretando siempre en dirección a las tablas.
Se dirige con decisión el matador muleta en mano para iniciar su trasteo ante un toro que no muestra franqueza y de embestidas informales e incluso defendiéndose. Lo intenta Borja con ambas manos pero nada, por el pitón izquierdo es que no tiene ni un muletazo. Mucho mérito y exposición por parte del torero pero no hay nada que hacer, ante lo cual lo despacha el matador de una estocada como casi todas las que se han recetado esta tarde que sin llegar a ser bajas, todas rondaban lo que se denomina “el rincón” en alusión a como las solía colocar el gran maestro rondeño Antonio Ordóñez. Silencio.
Destacar que el subalterno Javier Ambel se desmonteró tras parear al quinto de la tarde.
Y por último repetir que hoy ha sido el día del tendido 5 sin tanto viento, si acaso alguna brisita, otros días les toca a los del 10, otros al 9 y si los toros mansean al 2 o al 3 y digo yo ¿Cuándo nos va a tocar al 7?.
Sábado 1 de junio corrida de rejones, señor director Don Manuel del Moral me concede permiso o ¿me lo pido de asuntos propios?.
Sea como sea el domingo más y mejor.
Crónica: Tomás Mata Menchero
Foto: © Alfredo Arévalo (Plaza 1)
Plaza de toros de Las Ventas. Toros del hierro de Santiago Domecq y Luis Algarra (4º). Lleno de no hay billetes.
Uceda Leal, saludos y palmas.
Alejandro Talavante, silencio y palmas tras aviso.
Borja Jiménez, oreja tras aviso y silencio.
