Siempre es un placer volver a la finca «Hato de Garro», propiedad del maestro José Ignacio de la Serna y este pasado sábado, pudimos encontrarnos con buenos amigos que hacía tiempo que no veíamos y con buen toreo, que ya también tocaba.
El bueno de Jose Ignacio de la Serna que estuvo acompañado en esta ocasión de su hija Marina, le preparó a Víctor Puerto tres animales, una vaca vieja de ocho años, un toro y una extraordinaria jabonera que hizo disfrutar a todos los presentes.
En primer lugar Puerto eligió lidiar la vaca vieja, que fue buena destacando su templanza, que acudió al caballo varias veces y con la que Víctor rompió el hielo de una jornada agradable.
A continuación se tentó el toro que destacó por su humillación, bravura y calidad, donde pudimos ver a un Víctor Puerto que demuestra que su afición no decae por mucho que los años pasen. Puerto está de sobra preparado para afrontar una temporada que esta vez si no surgen problemas servirá para celebrar su XXV Aniversario de matador de toros y que por la maldita pandemia no pudo llevarse a cabo.
Y terminamos la bonita mañana de tentadero con una extraordinaria vaca jabonera que hizo el disfrute de todos los amigos que nos encontrábamos en la centenaria placita de tientas de «Hato de Garro» especialmente a los que se pusieron delante.
Un famoso ganadero manchego, a veces más conocido por sus gafas de sol y por fumar puros, que por la bravura de sus toros, dijo en una ocasión en un famoso canal de televisión, que el encante minoritario es minoritario porque no embiste, pues el que esto escribe, tiene que decir que si los encestes minoritarios son como el que la familia De la Serna cuida y mima diariamente a sus animales de encaste Veragua, bienvenido sean los encestes minoritarios. Es una pena que estos no se lidien en plazas de toros en festejos de mayor importancia. Les puedo asegurar queridos lectores, que con las vacas que ayer se tentaron en casa de José Ignacio de la Serna y el toro, muchos hacen una ganadería. Que maravilla ver embestir esa vaca jabonera, de encaste Veragua, fue lo que todo ganadero busca, bravura, humillación, casta, acometividad, fijeza y durabilidad, lo tuvo todo.
Esta jornada campera sirvió para que Víctor Puerto siga con su preparación de cara a los inminentes compromisos profesionales que el matador tiene en unos días en la feria colombiana de Puente Piedra (Bogotá), donde está anunciado en una corrida de toros y un festival, carteles que ya avanzó Cargando la Suerte.
Después de Víctor Puerto en esta última vaca cogió la muleta su tío, el maestro Antonio Sánchez Puerto, pero de eso hablaremos en otro momento, pues la actuación del maestro bien merece un reportaje aparte.
Terminamos este maravilloso día de campo en pleno Valle de Alcudia, degustando unas patatas con costillas que nos preparó el bueno de Ramón el solanero, regados con unos maravillosos vinos de Bodegas Naranjo, charlando de toros con amigos que al fin y al cabo es lo que más nos gusta.
Enhorabuena a la familia De la Serna porque animales como los que pudimos ver el pasado sábado, son los que a buen seguro les da fuerza para seguir luchando por el ganado bravo, aunque sea este, de encante minoritario.
Reportaje realizado por © Manuel del Moral Manzanares.
