Álvaro Ramos Golderos será el encargado de pronunciar el tradicional pregón taurino, que a modo de clarines y timbales dará vía libre a una nueva feria taurina de la Virgen del Prado. El Ateneo Taurino Manchego apuesta de nuevo por los jóvenes emergentes que habitan entre nuestros mejores aficionados de la capital y provincia, que son muchos, muy buenos y perfectamente preparados para encarar con dignidad un acto tan importante como este.  En el caso de Álvaro tenemos amplia constancia de hechos que nos confirman que estamos sobre todo ante una gran persona y un grandísimo aficionado. De los cabales, de los que da gusto escuchar cuando hablan de toros, de los que les brilla la mirada cuando ven un toro arrancarse al caballo por derecho y de los que lo pasan mal y sufren cuando nuestra fiesta se adolece de los numerosos “virus” que la rodean de manera incesante.

Álvaro cumplirá 35 agostos en las vísperas de la octava a nuestra “Morena del Prado” ya que nació en Almagro, un 21 de agosto de 1983. Es técnico en comunicación y periodismo taurino y desde pequeño palpa los entresijos de la fiesta de los toros, acompañando por festejos cercanos a su zona quien fuera corresponsal de Lanza y La Tribuna, su padre.

Álvaro sabe lo que es “ponerse delante” ya que en los años 2003, 2004 y 2005 actúa en diferentes becerradas, dos de ellas en la bicentenaria plaza de toros del santuario de Ntra. Sra. De las Nieves (patrona de Almagro) y concretamente en el 2.004 en la plaza de toros de Almagro, año de la célebre faena del maestro Manzanares al toro “Teclero” de Alcurrucén. Novillada en la que compartió cartel con un tal Rubén Pinar, que al parecer fue quien le mojó la oreja al bueno de Álvaro y demás compañeros de cartel.

Un gran acierto por parte del Ateneo Taurino optar por este gran aficionado, que le dará categoría al atril del Antiguo Casino, desde donde pondrá voz al comienzo de tres apasionantes días de toros en nuestra capital.

-Álvaro en primer lugar agradecerte tu generosidad y tu disposición siempre con nosotros. Dinos, ¿qué supone para ti haber sido designado pregonero de la feria taurina de este año, y de qué manera te llega el ofrecimiento?

-Pues la verdad es que el ofrecimiento que me hizo Antonio Espadas hace prácticamente un año me superó un poco. Me llamó por teléfono, y cuando me lo dijo no supe qué decir. Lo primero que pensé es que me venía grande y que no tenía ningún mérito especial acumulado para ostentar este honor. Pero Antonio me dijo que quería dar voz a los jóvenes, que ya sabes que es una de sus obsesiones, y por ahí me convenció, aunque lo cierto es que no me hice mucho de rogar. Es una responsabilidad enorme, pero me siento un privilegiado y me hace una tremenda ilusión.

– Sin desvelarnos lógicamente los detalles del mismo, pero háblanos de la estructura del pregón y quienes han formado parte de esa inspiración necesaria que hace falta para plasmar en los fragmentos las sensaciones y mensajes que querrás transmitir…

Habrá un protagonista clarísimo. En un principio pensé no desvelarlo hasta llegado el día, pero creo que será bueno decirlo: se trata de Joaquín Rodríguez “Cagancho”. Desde hace 7 años aproximadamente estoy investigando su vida. Es un personaje tremendo y fue un torero importantísimo, al que por desgracia no se ha hecho justicia. En la historia tienen mucho más peso sus sonadísimos fracasos. Así que me parece que tiene cierta gracia que un almagreño intente ponerlo en su sitio, y la ocasión la pinta calva, porque ya anuncio que desvelaré un buen puñado de anécdotas protagonizadas por Cagancho en Ciudad Real, y que creo que serán desconocidas por la inmensa mayoría de los aficionados capitalinos. Además su figura me servirá para reflexionar sobre mi propia forma de entender la Tauromaquia.

– Nos consta que eres un gran orador como has demostrado en tus programas de radio y en tus diferentes intervenciones periodísticas, pero esto de ponerse ante un atril es muy diferente porque factores como la sensibilidad, los recuerdos, las vivencias hacen del momento un trance distinto a todo…

Gracias por el piropo, pero lo de hablar en público y verle la cara a la gente es algo a lo que no termino de acostumbrarme. Seguro que ese día ni como, ni meriendo, ni duermo. Además soy un sentimental tremendo, aunque en el pregón he intentado evitar temas que puedan despertar mi lado llorón. Va a ser un pregón muy taurino en el que no voy a hablar de mí. Todas mis referencias personales serán únicamente a mi forma de ver el toreo.

– ¿Y tú Almagro de tu alma cómo se encuentra? ¿Se pueden empezar a vislumbrar atisbos de mejoría y recuperación, hacia aquella Almagro señorial donde ir a los toros era cita obligada para cualquier aficionado, año tras año?

Pues podría intentar venderte la moto, pero no creo que sea positivo para nadie. Almagro se encuentra mal, fundamentalmente porque hemos perdido nuestra identidad. Cierto es que por lo menos abrimos la plaza después de tocar fondo en los años 2013 y 2015 en los que no hubo toros. Pero no podemos conformarnos con eso. Como bien sabes Víctor, históricamente en Almagro se daba el cartel más fuerte de la provincia el día 25. Y respetando profundamente a los toreros que harán el paseíllo este año, que son perfectamente capaces de darnos una gran tarde de toros, la realidad es bien distinta. Almagro se ha alimentado siempre de la presencia de aficionados de toda la provincia, de toda la región, y si me apuras de muchos puntos de España. Y hoy esto ha cambiado. Necesitamos que quien dirija los destinos de Almagro (empresarios y políticos) decidan apostar fuerte, muy fuerte, y que ese esfuerzo pueda tener continuidad, que se pueda hacer labor.

– Para saber un poco más del “Álvaro aficionado” ¿quiénes han sido para ti los toreros más importantes de la historia de la tauromaquia pasada y la más reciente y cómo ves la situación del toro bravo actual?

Como aficionado intento que me quepan muchos toreros en la cabeza, pero mi forma de entender el toreo es a través de la naturalidad y el clasicismo. Soy de Joselito hasta la médula (José Miguel Arroyo), y tengo en un pedestal a otro figurón como Antonio Bienvenida. Es el torero más natural que yo he podido ver, era tremendo. Y otros dos toreros que me interesan muchísimo son Roberto Domínguez y Julio Robles. Pero si hablamos de los más importantes de la historia creo que tenemos que meter obligatoriamente a Joselito y Belmonte, no por separado, sino juntos. La suma de los dos cambió radicalmente el toreo. Y por supuesto, cómo no, Manolete. Con él se produjo la última gran evolución en la forma de torear. Hoy muchos todavía beben en esa fuente.

Con respecto a la situación del toro bravo y de la Tauromaquia, si bien es preocupante, no creo que sea agonizante como algunos, interesadamente, quieren vender. Por un lado están los problemas internos, que si bien han existido siempre, no quiere decir que no haya que denunciarlos. Es tremenda la desunión en el toreo y el conflicto de intereses particulares siempre en detrimento del interés general. Ahí hay mucho que hacer. Pero por otro lado están los problemas externos. Más allá de las corrientes de falso animalismo, creo que el problema radica en que estamos en la diana del juego político como nunca antes habíamos estado. Siempre he pensado que el toreo no entiende de política, pero dado que algunos partidos nos han metido en ese juego, me temo que no nos queda otra que jugar. Y nuestra estrategia debe ir encaminada a que nos vean fuertes, algo que hoy por desgracia no sucede. Si nos vieran fuertes, no me cabe duda que nos dejarían en paz. Esa es nuestra batalla. Somos muchos más de lo que pueda parecer, pero tenemos que demostrarlo.

– ¿Cómo ves el panorama actual de la fiesta en nuestra provincia?

Está claro que la capitanía general hoy por hoy la tiene Ciudad Real. Hay plazas que están haciendo una buena labor, como Alcázar, Tomelloso o Almodóvar por ejemplo. Pero nuestros pueblos han sido históricamente un nicho de rodaje para muchos novilleros y toreros de segunda línea de parrilla, y eso está desapareciendo. Ahí estamos perdiendo un poco también nuestra identidad. Luego está el tema de la afición. Creo que hay afición en nuestra provincia, pero quizá nos falta formación. En el siglo XXI, en la era de la información con todos los medios a nuestro alcance, probablemente somos los aficionados más informados de la historia, pero dudo que seamos los aficionados más formados. Ahí todos tenemos una responsabilidad probablemente.

– Como gran profesional del periodismo, ¿Qué opinión te merece la información taurina actual de nuestro entorno más cercano?

Algo importante es que todos los compañeros tenéis algo muy bueno y que por desgracia no siempre se da en el periodismo taurino: sabéis ver una corrida de toros. Tú sabes perfectamente que hay gente que se aventura a escribir y hablar de toros sin tener ni idea. Pero creo que en nuestra provincia eso no se da. Yo aprendo mucho leyendo vuestras crónicas y escuchando vuestras opiniones, te lo digo de corazón. Después está la destreza con la pluma que cada cual tenga, pero sabéis de lo que habláis. También haciendo algo de autocrítica y empezando por mí, probablemente a veces somos demasiado empáticos y perdemos nuestro sentido crítico, pero cuando esto sucede creo que es siempre con el afán de no herir más allá de lo necesario. La nuestra, como bien sabes, tampoco es una tarea fácil, porque generalmente juzgamos a personas que se juegan la vida haciendo algo que nosotros no somos capaces de hacer.

– ¿Y de los carteles de la presente Virgen del Prado 2.018 qué opinas?

Me gusta muchísimo la Feria. Aprovecho para felicitar a los Lillo por el trabajo que vienen haciendo en Ciudad Real, no sólo este año. Me parece que los carteles son muy equilibrados, que abarcan todas las sensibilidades, con figurones del toreo a pie y a caballo, con jóvenes que interesan y con toreros de la tierra. Está el atractivo de volver a ver a Aníbal de luces junto a dos máximas figuras del toreo a los que seguro que les aprieta los machos, tenemos a Emilio Huertas que necesita esa corrida como el comer. Me gusta que tengamos una corrida de encaste Núñez, que es un encaste que como aficionado me interesa muchísimo. En fin, todo es mejorable en esta vida, pero me parece una gran feria y será un honor pregonarla.

– Parece haber causado un gran revuelo el nuevo modelo de confección de carteles por parte la empresa actual que regenta la primera plaza del mundo que es Madrid, a través de un bombo que contendrá unas bolas y que al azar decidirá las combinaciones definitivas, como si de un sorteo de fútbol Champions League se tratase. Dinos los tres hierros que meterías en el bombo ganadero y los nueve nombres del bombo de los matadores para tu Feria Taurina de la Virgen del Prado… (Esta es una encerrona por lo que te pido disculpas Álvaro…)

– (Sonríe Álvaro) Sí que es una encerrona, sí. Pero venga, para eso estamos. Para ser elegante y no pisar más charcos de los necesarios, de momento vamos a dejar a los seis toreros que tenemos a pie y a los dos hierros ya anunciados. Y vamos a añadir a Emilio de Justo que está en un momento tremendo, Fernando Tendero al que siempre sería una alegría ver en Ciudad Real porque además se lo ha ganado, y Alejandro Talavante, un torerazo que está para reventar cualquier plaza y al que el sistema está tratando muy duramente. Y el otro hierro, por añadir variedad, vamos a decir La Quinta. Ese creo que sería un buen bombo.

– El Ateneo Taurino por segundo año apuesta por la juventud, ya que nuestro querido Rubén Aparicio fue tu antecesor, pero quizá nos falta atraer a más personas jóvenes que ocupen los tendidos de las plazas de toros. ¿Cuál sería la fórmula en tu opinión?

Yo veo mucha gente joven en las plazas, pero es cierto que siempre podrían ser más. Aquí creo que la comunicación es fundamental. Una de las evoluciones que debe afrontar el toreo es esa, tenemos que evaluar qué estamos haciendo para llegar a los sectores de edad más jóvenes y corregir lo que estamos haciendo mal, que me temo que es casi todo. Los empresarios y los toreros deben perder el miedo a poner en manos de profesionales del marketing sus estrategias. Claro está, esos profesionales deben ser primero y ante todo, aficionados. Si son solo profesionales del marketing no nos vale porque lo más fácil es que se desvirtuara el mensaje. El toreo es un mundo que hay que conocerlo. Si no se conoce no se puede comunicar.

– Volviendo al pregón… ¿A quién irá dirigido de manera especial?

Yo creo que a todos los aficionados. Creo que puede resultar curioso incluso para gentes que sientan curiosidad y simpatía hacia la historia aunque no sean aficionados. Además siguiendo el camino abierto por Rubén Aparicio el año pasado, también habrá imagen y muchos podrán ponerle cara y formas toreras a Cagancho, y ver algún que otro documento curioso. Ahí lo dejo.

– ¿Serás clásico como Bienvenida o “Chenel” en la oratoria, o exaltado y atrevido como “El Cordobés” o Palomo?

No soy yo demasiado atrevido para casi nada, la verdad. Uno se pone a escribir y no sabe muy bien la sensación que va a generar en el lector, o en el oyente, pero creo que seré más ortodoxo que heterodoxo. Igual estoy totalmente equivocado, no lo sé.

– ¿Qué te gustaría transmitir como mensaje principal al aficionado y qué concepto te gustaría que se llevara la gente del Antiguo Casino tras escuchar tu palabra?

Pues verás, cuando yo voy a un acto de este tipo siempre lo hago con la intención de aprender algo. Así que si consigo que alguien salga de allí sabiendo algo que no sabía, me doy por satisfecho. Si además puedo generar cierta reflexión en el interior de los aficionados, mejor que mejor. Sería un logro tremendo generar algo de debate, que los que presencien el pregón después tengan ganas de contrastar alguna opinión conmigo o con otros aficionados, bien porque estén de acuerdo, o bien por todo lo contrario. Que vayan, que lo escuchen, y que lo juzguen sin temor después. Como se suele decir, palos a mí (risas displicentes)

Lo dicho, que el atril del Antiguo Casino te haga sentir bonitas sensaciones hablando de una de las pasiones que alimenta tu alma. Nosotros allí estaremos para disfrutar de tu pregón. ¡Muchas gracias Álvaro!

Gracias a ti Víctor, y a Manuel. Y ánimo para seguir con vuestra desinteresada y valorable labor. Ha sido un placer.

Entrevista realizada por Víctor Dorado Prado.

Fotos: Archivo: Álvaro Ramos.